El granallado es un tratamiento superficial en el que unas partículas de diferentes materiales y tamaños, llamadas granalla, se proyectan sobre las piezas a velocidades entorno a 60-110 m/s.

Una granalladora es una maquina que consigue proyectar granalla de una manera controlada, realizando a su vez la recogida, limpieza y selección de la granalla proyectada y la captación y filtrado del polvo generado durante el proceso.

La finalidad del granallado es también muy amplia puede ser desde una limpieza de la arena resultante del proceso de fundición, el decapado de chapa o perfiles en negro, piezas de forja o tratamiento térmico, mejorar las propiedades mecánicas de la pieza, crear una rugosidad adecuada para favorecer el anclaje de la pintura o incluso un acabado estético como tal.

Se puede proyectar prácticamente cualquier material, granallas de acero, acero inoxidable, acero bajo carbono, granallas de alambre cortado, granallas plásticas, micro esferas de vidrio, corindón, bicarbonato, zirconio, cascaras de nuez, avellana y almendra, etc, todas ellas clasificadas también por su tamaño o granulometría.

Las granallas metálicas mas empleadas son las de acero fundido y se clasifican según norma SAE J444 que las clasifica por su geometría, esférica (shot) o angular (grit) y por su granulometría de S780 (Ø 2,5 mm) a S70 (Ø 0,3 mm) para la granalla esférica y G12 (Ø 2,5 mm) a G 120 (Ø 0,2 mm) para la angular.

Pese a ser procesos con resultados finales similares, se denomina granallado cuando la granalla se proyecta mediante turbina y chorreado cuando la granalla se proyecta con aire a presión.

Debido a la gran cantidad de aire a presión necesario para chorrear, en términos generales es mucho mas eficiente granallar que chorrear.

Las maquinas de granallado suelen requerir de una mayor inversión económica inicial que las maquinas de chorreado, sin embargo el proceso de granallado es mucho mas eficiente que el de chorreado, tanto en términos de producción como en términos energéticos y no es necesario disponer de un compresor de aire.

Durante el proceso de granallado se genera mucho polvo y es necesario una buena aspiración de aire, tanto para limpiar la cámara de granallado, como para limpiar la granalla. Antes de devolver el aire a la atmosfera se filtra en filtros de cartuchos o mangas.